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Hoy tenemos a un invitado manchego, César Sánchez, más conocido por César ultraviviente, entrenador personal y corredor de ultramaratones.
Recientemente ha terminado la Volcano Ultramarathon de Costa Rica y la ultra Sierra Nevada en tan sólo 5 dias.
Pasamos ya a saludarle ;
Muy buenas César. ¿Qué tal estás?
-Buenos días, aquí ya recuperado. Después de estas carreras me doy una semana de descanso y a la siguiente empiezo con bicicleta para no meter impacto.
1. – En la presentación ya decíamos que has corrido dos pruebas de ultramarathon en 5 días.
Lo primero, ¿Cómo ha sido la experiencia del ultramarathon de Costa Rica en tiempos de Covid-19?
-Es una alegría poder disputar una prueba en tiempos de pandemia. En tiempos de Covid se pueden hacer carreras si se hacen bien. El protocolo de esta carrera ha sido muy exigente: nos hemos metido en una burbuja anticovid y ha salido todo muy bien. Ha sido complicado, pero se ha conseguido.
La carrera de ultramarathon de Costa Rica pasa por sitios que el turista no puede pasar. Nos han metido por unos paisajes preciosos. La organización todo este tiempo ha estado pidiendo permisos para pasar por parajes naturales increíbles. La biodiversidad que tiene este país es enorme. Hemos saltado sobre ranas rojas, hemos tenido que agarrarnos a una cuerda para pasar por encima de serpientes y hemos visto hasta monos aulladores…
Ha sido impresionante.
-La Vulcano Ultramarathon de Costa Rica ha constado de 250 km repartidos en 6 etapas con un desnivel de 12000 metros positivos ¿Cuál ha sido el momento más duro?
-El momento más duro fue la etapa 6, la última etapa. Sobre el km 44, antes de llegar a un punto de control en el que teníamos que pasar por una zona selvática 10 km de ida y 10 de vuelta. La organización nos dijo que no fuéramos solos e intentáramos entrar en pareja ya que es una zona peligrosa en cuanto a animales y el trazado de la carrera. Por mi posición, llegue solo y se me hizo la noche y ahí me planteé abandonar, pero cruzarte con compañeros como Chema Martínez y Zahir que me animaban para que siguiera, al final tiras de coraje, tiras de reserva y terminas. Ese momento fue muy complicado por la alimentación, el sitio donde estás y la soledad.
Chema Martínez ha reiterado que la etapa 2 de la vulcano ultramarathon es la etapa más dura que ha corrido nunca. Es un corredor que ha disputado pruebas muy duras, por desiertos, glaciares , hielos. Que una persona que ha corrido pruebas tan duras y tú hayas logrado terminarlas, te hace sentir un superhéroe.
La ultramarathon ya sabía que era muy dura, pero las condiciones que ha habido en ella han endurecido aún más la prueba.
2.- La alimentación que has tenido durante la carrera de Costa Rica es de comida liofilizada, ¿en qué consiste esta comida?
La comida liofilizada es un gran aliado cuando vas a hacer una ruta de montaña o cuando tienes que irte a un sitio donde vas a estar andando. Al final te llevas un hornillo pequeño y con calentar agua, la comida está lista. Con agua fría también puedes hacerlo, aunque tendrías que esperar media hora para que estuviera preparada.
Hay una diferencia entre la comida deshidratada y la liofilizada. A la deshidratada le quitan todos los líquidos y a la liofilizada le quitan el agua, por lo que al rellenar ese alimento de agua vuelve a tener su textura, conservando todos los nutrientes.
Una bolsa de comida liofilizada tiene sobre 1000 kcal, la deshidratada te llega a 400 kcal como máximo.
3.- Y al volver a España, quisiste seguir con otra prueba dura como es la Ultra Sierra Nevada, lograste llegar muy emocionado. ¿Cómo fue esa sensación?
– La llevaba planeando 2 años con un amigo, David kala . En un principio estaba puesta para Junio por la Covid y al final se puso 5 días después de Costa Rica. El Martes, a las 9 de la noche, llegué de Costa Rica a Ciudad Real y el Viernes, a las 10 de la noche, estaba ya iniciando la ultra sierranevada. Fue súper emocionante por llegar con él. En el trascurso de la carrera me encontré bien, no íbamos a un ritmo de competición, pero cuando toqué nieve mis piernas ya estaban al límite. Al final fue todo un cúmulo de emociones. Había llegado de Costa Rica y mi amigo había conseguido su reto. Al llegar a meta rompí a llorar
4.Para los que no te conozcan, ¿De dónde viene tu pasión por correr y el nombre de ultra viviente?
La pasión por correr me viene de pequeño de cuando mi padre me llevaba al campo. Me acerca a la niñez. La naturaleza es parte fundamental de nosotros. Hacer estas pruebas de resistencia me hacen sentir libre.
El nombre de Ultraviviente viene por la primera carrera que me apunté que fue la ultra de sierra nevada. El «ultra» es porque iba a correr una carrera ultra y «viviente» porque iba a vivirla a tope. El diseño de la camiseta es el siguiente: me gustaba Superman por eso el logo es triangular, el verde es por la naturaleza, el ciervo es porque el animal me encanta y la parte superior del logo es el perfil del pico Veleta
5.- Además de todos los entrenamientos que haces, visitas la Clínica Centro de Ciudad Real para sesiones de fisioterapia: ¿Cómo de importante son estos tratamientos para superar este tipo de pruebas?
– Me alegra que me hagas esta pregunta. Hay mucha gente que se dedica sólo a correr y luego no sabe porqué tiene ciertas dolencias. Antes de irme a la Volcano ultramarathon, tuvimos una preparación muscular en la Clínica Centro. Los entrenamientos son muy importantes, pero si tú no tienes una preparación muscular y te vas con las piernas descargadas, allí sufrirías mucho más. La preparación con Pepe Casas en la Clínica Centro ha sido fundamental para lograr estos retos.
Yo, cuando llegué de Costa Rica, fui a la Clínica de Pepe al día siguiente y el Jueves. Si no es por esas sesiones, estoy seguro que no hubiera podido terminar la ultra de sierra nevada
6.En 2019, conseguiste el reto 48 horas para visibilizar la enfermedad de ELA y recaudar fondos para la asociación VivELA de Ciudad Real. ¿Esperabas tanta repercusión?
Que vá! Cuando íbamos a la meta yo pensaba que iba a estar José Manuel, el dueño de Nexter, algún trabajador, la familia y amigos. La gente se nos unió para hacer los últimos metros y en la meta había ya mucha gente. Cuando ví que se había montado un arco de meta y música, me emocioné mucho. No tengo a nadie cercano con ELA. La idea surgió de mi amigo David Kala, que ayuda a una asociación de ELA y yo también quería poner mi granito de arena
